martes, 30 de diciembre de 2008

Tequila en las venas!

Hola Doitor:


Un trauma que me aquejo durante siglos vida tras vida, cuerpo tras cuerpo, fue no saber que hacer durante la noche en la que terminaba el año, hasta que alguien invento el tequila en este lado del mundo y desde entonces cada cuerpo en el que reencarno viaja y se muda para vivir en este pais.

Oiga doitor y esta noche nos van a dar pastillas de esas que saben a fin de año?

ahi le encargo unas capsulas con sabor a pozolito para la cena y una jeringas con dosis de menudo para los amanecidos, por el tequila no se preocupe que me sale de las venas, procurare no cortarmelas tan profundo como hace 10 años.

Saludos desde mi acolchonada celda.


viernes, 26 de diciembre de 2008

Sexo


Obvio el título no es más que publicidad barata...

Acabo de tener un ataque de migraña y a penas me voy recuperando.

Vi una estúpida película navideña que me gustó, como no, hay que confesarlo, si aquí se confiesan los traumas.

Últimamente me la había pasado obsesionada, presionándolo para que pensara que no puede vivir sin mí, que soy, algo así como el amor de su vida.

Aunque Ricardo siempre me dice que eso sólo se puede decir antes de morir, o creo que se lo dije yo, pero hablamos tanto tiempo ebrios que es difícil recordar qué es de quien.

Tema de otras oraciones cortas que se convierten en traumas-post.

Hoy, después de alucinar con mis medicinas para la migraña, me he dado cuenta que no necesito eso. Aún hay tantas cosas que quiero hacer. Se me hace que ha de ser lindo despertar con una mujer a tu lado. Saber como se siente tocar unas tetas que no son las tuyas, sólo para ver qué se siente. No puedo quedarme en una linda relación de "high school sweethearts" y esas mamadas, porque quiero más.

Creo que algún día quiero tener hijos, o quién sabe. Pero darme la posibilidad de no tener planes. Solía obsesionarme con la idea de que él me amara para siempre, hasta me exictaba cuando me decía cosas enfermas como "te obligaré a que te quedes conmigo", pero ya no. Hoy siento que no quiero tener planes, quién sabe si lo amo, porque después de tantos analgésicos confundo hasta los acentos. Algo tengo claro: no quiero quedarme dónde estoy.

En materia sentimental, obvio...porque en materia de vida, crecimiento lo lógico es querer avanzar y esas jaladas.

Pd. Siento tooodos los errores, pero esto no sería honesto sino lo escribiera, aún, un poco drogada.

jueves, 25 de diciembre de 2008

Reuniones Familiares

Detesto las fechas donde las reuniones familiares son obligatorias, de hecho detesto todo evento social a donde se tenga que asistir por obligación pero los detesto más cuando se trata de ver a mi familia. Mi familia es aburrida, lo que hace que verlos siempre resulte en una tortura hasta que llega la hora de irnos, para ejemplo la navidad pasada donde estuvimos todos sentados sin hablar hasta que uno de mis sobrinos se cayó y ese fue el tema de la conversación un rato hasta que de nuevo hubo silencio.

Este año no fue la excepción. Con mi familia nuclear desmoronándose, mi padre decidió irse con su hermana, nosotros iríamos con la hermana de mi madre forzados por la costumbre más que por las ganas. Mi sorpresa fue que al llegar me enteré que únicamente asistiríamos nosotros y la suegra de mi tía, bueno, ese era el plan hasta que mis tíos se pelearon y él decidió que no traería a su madre.

La cena de anoche marcó un nuevo record: 7 personas en una cena de navidad.(Mi madre, mi hermano, mis tios, dos primas y yo) cuando mi familia materna se conforma de una abuela, 10 hijos, más de 30 nietos, 10 bisnietos y contando. Oficialmente no habría mucho de que hablar, el tema de toda la noche fueron los problemas por los que pasa la empresa para la que trabajamos una de las primas y yo, lo que sea con tal de evitar los temas deprimentes que abundan en esta familia.

Para las 12:30 de la noche ya estábamos de regreso en casa, mi nivel de alcohol en la sangre era cero y el espíritu navideño se había ido horas antes. Debí irme con la familia de mi novia sin importar las vergüenzas que me hubieran hecho pasar, al menos hubiera tenido más cosas que contar...

Janus

lunes, 22 de diciembre de 2008

La llamada que nunca llegó

Me cercioro por tercera vez que esté bien conectado.

Seguro es por lo que publiqué en mi blog, no debí poner su nombre....chin y si me demanda, pero ¿qué diablos me puede quitar?

Claro, seguro es porque no hay luz.

Chin, pero mi teléfono no necesita luz

¡Mamá contestá la llamada en espera!, ¡qué es con R-2! ¡Te pasas, ya se perdió!

Seguro era él...de verdad que está rebasada por la tecnología...que pe...

Ah no, era mi tío. Ya habló al celular.

Bueno que no me piensa llamar, ¿con quién le puedo poner el cuerno de emergencia?. ni crea que lo voy a esperar para siempre...

(tono de mensajes)

Perdón por no llamar amor, estoy pasando tiempo familiar. -------------------------(llene aquí con cosas cursis)

¡Pobrecito!, assssh sí lo amo...

jueves, 18 de diciembre de 2008

twitter

Me trauma solo pensar que pasen 24 horas sin twittear alguna babosada, y me trauma de sobremanera por que hace apenas unos meses divulge en un post de mi blog que me parecia una de las cosas mas inutiles de la red, hoy soy un "esclavitter".


Este sanatorio mental ya esta agarrando ambiente tenebroso y lugubre gracias a sus solitarios pasillos, pero alla al fondo se escuchan unos gritos de dolor en una que otra celda, eso me hace sentirme confortable y no perder el miligramo de cordura que me mantiene atado a mi tratamiento con la esperanza de algun dia ser llamado "mentalmete sano".

miércoles, 3 de diciembre de 2008

Casi perfecto

Fue él quien decidió besarme, en ese café suntuoso que yo tanto odiaba, pero que accedí solo por pasar una buena tarde de charla interesante y bonita vista, sí, de él.

No podía creerlo, eran SUS labios en los míos. Tendría que decirle que tengo tanto tiempo enamorada de él?? Bah! No inporta que lo sepa! Lo importante era ese momento, sus manos en mis mejillas y su respiración en ritmo con la mía.

Nos vimos un par de veces más, repitiendo la escena: café, buena charla, abrazos y besos tiernos...

Hasta entonces, y desde mi último noviazgo, no me había interesado una relación seria, el temor a salir herida de nuevo era mucho mayor que el deseo de la adrenalina propia del enamoramiento. Pero era distinto, su cabello, sus ojos, su voz, su sonrisa... A cada momento aumentaba ese calorcito interno, con cada cita, cada llamada, cada mensaje. Todo indicaba que él sentía lo mismo, así que cedí al amor... otra vez...

Hoy me decidí. Le confesé que no solo me gusta, le dije cuánto lo extraño y necesito, no pude evitarlo. Lo agradeció, pero su actitud cambió al instante, se fue sin despedirse.

Creo que su idea era otra. Me duele pensar que fue todo, solo algunos besos que no significaron más para él, pero todo para mí. No quiero hablarle o escribirle. Prefiero que quede así, pero creo que duele más haberlo tenido y perderlo que mantener la imágen del hombre perfecto e inalcanzable que fue durante tanto tiempo.