sábado, 22 de noviembre de 2008

La maldita costumbre de llegar tarde





Llego tarde. Claro.

Él entra a la conferencia sin mí, y yo me quedo disfrutando del café barato de la entrada. Pero un tal Alexandre "Montreal imported" hace que intente sentarme en primera fila.

El asiento de la primera fila está roto, mi café se cae sobre mí. Yo me caigo. Los ponentes rien, sí también el de Montreal. Recuerdo los tragametierra que salían en la 15 a 20, pero no se compara.

Me da igual, voy a saludarlo al final de la conferencia. Me da su teléfono.

2 diagnósticos:

Janus dijo...

Si lo tenías todo preparado para ligarte al expositor entonces te salío muy bien. Felicidades.

Si no era así entonces debo decir que eres una maestra del humor involuntario. Felicidades por eso también.

marylandia dijo...

sniff snif!! buuu mal plan
si en gustos se rompen generos
el chiste me gusto jajaja

despes te leeo con calma
bye.